DIENTES SANOS EN COMUNIDAD CAÑEROS

Por Samanta Barbosa
Cuarto semestre

El 16 de abril fue la primera vez que visité el albergue de los cañeros.
Y volvería a hacerlo, sin duda alguna.

Era sábado. El camión partió de la preparatoria alrededor de las 8 de la mañana, con alumnos somnolientos de cuarto semestre (somnolientos, pero con el mayor de los ánimos), bolsas de despensa y regalos para los niños del albergue.

Lo más bello que recuerdo de aquel trayecto son los volcanes, haciéndose más y más grandes conforme nos acercábamos a Quesería, Cuauhtémoc. Y por fin llegamos.

Las puertas del albergue se abrieron. Descargamos el camión y depositamos las bolsas de despensa dentro. Las señoras del albergue sentaron a sus niños en una  barda larga, bajo un árbol. Al menos una docena de niños y niñas de diferentes edades nos miraban con curiosidad.

Nuestra compañera Jimena Díaz fue quien nos presentó como alumnos del Colegio Anáhuac y expuso las razones de nuestra visita. También pidió a los niños que se presentaran. Uno a uno, dijeron sus nombres. Y después... ¡llegó el momento de jugar!

Salimos del albergue y jugamos "Pájaro, nido, parvada". Todos nos divertimos mucho y fue lindo
poder ver a los niños sonreír. Al terminar nos sentamos en el pasto y nuestros compañeros Jorge Pineda y Juan Fernando Santana comenzaron a dar una plática sobre higiene bucal. Les recordaron a los niños y a sus madres la forma correcta de cepillarse los dientes y las consecuencias negativas de no hacerlo.

Al finalizar, mis compañeros hicieron varias preguntas sobre los puntos tratados, y los niños que contestaban correctamente, recibían un premio. Después de esta dinámica, regalamos dibujos para colorear y paquetes de colores. Los niños adoraron este detalle y de inmediato se pusieron a colorear.

Regresamos al albergue y entregamos las despensas a las amas de casa.